Cuando empezamos a estudiar alemán, como cualquier otro idioma, nos interesa especialmente ampliar el vocabulario lo antes posible para expresarnos mejor. Es el fundamento del idioma y de nuestros estudios. Estoy convencida de que el método que elegimos desde el principio va a marcar mucha diferencia en cuanto a nuestro progreso y satisfacción con los estudios.
Ahora bien, puede haber tantos métodos de aprender el vocabulario como personas que lo hacen. Se puede aprender con mapas de aprendizaje, asociaciones, categorización, acrónimos, crucigramas, adivinanzas, sopas de letras, bolsas de palabras, redes de palabras, la construcción de historias, la música o el repaso… Si de tanta variedad de métodos tuviera que elegir dos, serían el repaso con las fichas y la lectura. En esta entrada he explicado cómo trabajar con las fichas. Ahora me gustaría centrarme en la lectura.
¿POR QUÉ LEER EN ALEMÁN?
Las personas que más leen tienen un vocabulario más amplio, también en su lengua materna. Desde mi punto de vista leer diversos textos en alemán es un acelerador innato del aprendizaje del idioma. Yo recomiendo leer ya cuando empezamos a estudiar, así aprenderemos más rápido. No obstante, hay un periodo crítico en el aprendizaje de un idioma cuando alcanzamos el nivel B1/B2. En este nivel ya entendemos mucho y podemos expresarnos con bastante soltura. Lamentablemente muchas personas se quedan estancadas en este nivel y ya no progresan más. Una de las mejores maneras de hacer este progreso, aparte de vivir en el país evidentemente, es leer textos cada vez más complicados. Hay personas que odian repasar el vocabulario con las listas o fichas, pero leen mucho sobre temas de su interés y así también amplían su vocabulario.
Cuando leemos, aprendemos y repasamos tanto el vocabulario como la gramática de forma pasiva e intuitiva. Si vemos la misma palabra repetida en varios contextos, sin diccionario entenderemos lo que significa. Al leer mucho en alemán, pronto simplemente intuiremos que algunas cosas no suenan bien en este idioma.
Podemos empezar con libros adaptados para estudiantes de alemán, pero pasar poco a poco a escoger textos más auténticos. Podemos leer libros para niños y adolescentes o algún libro que ya hayamos leído en español. Será más fácil seguir la fabula. Lo importante es leer cosas que nos interesen y seguir aunque sean pasajes difíciles. Si nos interesa el baloncesto, leemos sobre el baloncesto. Si nos interesa bucear, pues sobre este tema. Pronto nos daremos cuenta de que el vocabulario se repite. Podemos seguir blogs sobre nuestros temas favoritos o buscar páginas interesantes en las redes sociales. Para los principiantes es más fácil seguir Twitter, ya que los textos son cortos y las frases suelen ser más fáciles. Y en la página Lektüren encontramos libros para todos los niveles.
También podemos leer periódicos alemanes. Estos son los periódicos y las revistas más importantes en Alemania:
– Die Welt
– Die Zeit
– Frankfurter Allgemeine Zeitung, FAZ
– Süddeutsche Zeitung
– Bildzeitung
– die Tageszeitung
– Westdeutsche Allgemeine Zeitung
– Spiegel
– Focus
Estas son las revistas de economía:
– Handelsblatt
– Börsen-Zeitung
¿CÓMO LEER EN ALEMÁN?
Antes de empezar a leer es mejor tomar en cuenta la estructura del texto y los apoyos visuales, tales como las imágenes, los esquemas, mapas, fotos etc. Nos ayudarán a entender el texto. Observamos el título, los subtítulos, el índice y las ilustraciones para tener una idea de la estructura y contenido del texto (lectura previa).
Luego es recomendable leer todo una o dos veces para entender las ideas principales. No nos detengamos, aunque sean párrafos difíciles. Utilicemos el diccionario mínimamente, solo cuando realmente creamos que es necesario. Tratemos de adivinar el significado de las palabras que no conocemos, o simplemente las ignoramos si consideramos que no son importantes para la comprensión del texto. ¡Y cuando se pone difícil, sigamos adelante!
Podemos releer los pasajes que resulten muy difíciles. Usemos los conocimientos que tengamos del idioma, tema, tipo de texto y propósito (predicción) para entender todo lo que podamos. Podemos releer el texto en voz alta e intentar imaginarnos claramente lo que estamos leyendo. El sonido de nuestra voz contribuirá a que la información sea más fácil de recordar. Incluso nos podemos grabar leyendo. También es recomendable subrayar nuevas palabras, estructuras o expresiones y usarlas cuando podamos o escribir un resumen o explicar algo en alemán a un compañero o compañera de estudios.
¿Y tú que has leído últimamente en alemán? ¿Lo puedes recomendar?